viernes, 29 de abril de 2011

ENSAYO:La radio como espacio de construcción de identidades ¿Cumple este medio su rol de participación ciudadana?



En la actualidad es caótica la situación de los medios como promotores del servicio a la sociedad, la radio  necesita urgentemente ser repensada más aun cuando en los colectivos sociales no se busca fomentar el acercamiento entre personas, y donde es evidente que se ha desplazado el rol de integración y participación ciudadana  por intereses de mercado.

El problema radica en que no se integra a los ciudadanos en un proceso de construcción de identidades, hace falta ese compromiso con los radioescuchas; por ello el presente trabajo tiene como objetivo demostrar que la comunicación en radio ha sido confundida con difusión de información, dejando de lado la participación de los ciudadanos siendo esta lo que considera a la estructura social como llana inclusiva excluyendo practicas que convocan solo a los productivamente consumidores.

En primer lugar como señala Lenin Martell[1], se debe identificar los elementos que conforman a la participación ciudadana en la radio actualmente. Iniciando, nuestra inspección a través del análisis del hecho, se trata de un mensaje en donde participan actores sociales miembros de una comunidad: clase política, ciudadanos y una audiencia que es en su mayoría estudiantes, profesores, trabajadores universitarios y padres de familia.

Ante ello, es importante afirmar que en el contexto de la radio en ese espacio mediático, permite que se pueda llevar a cabo una búsqueda de consensos o disensos o el fortalecimiento de identidades individuales, así este contexto es trascendental para la creación de un espacio público en dónde los ciudadanos le dan un sentido a sus vidas.

Como señala Jerry Jara Llanos en su estudio “Cuando la ciudadanía se hace construcción o cuando la construcción se hace ciudadanía”, las experiencias de los ciudadanos y ciudadanas se dinamizan en la capacidad que tienen para comunicarse, para interpretar con códigos propios los contenidos y mensajes.

Así, como diría López Vigil[2], la ciudadanía se construye ; pero hay que tener en cuenta que ésta “es una construcción polifónica que no sólo parte de lo oficial sino también desde lo alternativo o lo mediatizado”; es así,  que los medios, y concretamente la radio, pueden tender puentes para generar ciudadanía y gestar procesos que favorezcan la constitución y consolidación de esa ciudadanía. De ahí, justamente, surge el concepto de radios ciudadanas.




[1] Lenin Martell.Sexto Foro AMCIR, Retos y perspectivas de la radio mexicana, Mesa 1: La participación ciudadana en la radio.  http://revistacomunicologia.org/index.php?option=com_content&task=view&id=113&Itemid=79
[2] LÓPEZ VIGIL, José Ignacio (2004): Ciudadana radio. El poder del periodismo de intermediación. (UCAB). Sp

En cuanto a los medios de comunicación y los comunicadores, hace referencia Jerry Llanos que el escenario mundial sobre la formación de profesionales en comunicación es dramática cuanto lo son las indefiniciones e incapacidades de ligar la sociedad con las lógicas del proceso; y como asevera Gumicio al respecto “hay miles de periodistas pero muy pocos especialistas en comunicación” y para ello presento el siguiente audio (entrevista a el lic, en comunicaciones Roberto Chullen-Director de la escuela de comunicación. USAT)

Realmente, la labor de un comunicador es la verdad y la transparencia pero sobre todo ese servicio a la sociedad, ¿La radio de hoy nos muestra ese compromiso con los participantes si hay escasos espacios donde la voz de los ciudadanos y sus problemas sociales son escuchados?, por ello la comunicación como proceso participativo debe ser fortalecido y coordinado, y bajo el establecimiento de espacios rotativos promueven el intercambio y la inclusión.

Por otro lado, Si la radio es un medio de comunicación que tiene tanta influencia en la vida de los ciudadanos es necesaria la utilización de la radio con fines educativos ya que se puede contemplar como una alternativa muy efectiva, puesto  que promueve la introspección del individuo. Como refiere María Cristina Romo Gil[1], en su libro Introducción al Conocimiento y Práctica de la Radio “El mensaje radiofónico entra en el terreno de lo abstracto, intelectualmente hablando propicia la captación de conceptos, la radio favorece la introversión, se dirige al individuo personalmente. El radioescucha así lo medita, siente y piensa”.

Así mismo tomamos las palabras de Merayo Pérez en su estudio sobre “Identidad, sentido y uso de la radio educativa”, la radio en cualquiera de sus formas ha de orientarse precisamente hacia un objetivo de carácter social y a lo largo de la historia lo ha hecho en tres direcciones; como apoyo directo a movimientos sociales, como extensión de la instrucción formal y como instrumento para la educación no formal por medio de radios populares y comunitarias.  


Por ello afirmo con seguridad que la radio necesita ser repensada para hacerle frente a los retos actuales, puesto que hay una sustitución del concepto de comunicación radiofónica unitaria, intelectual, informativa y cultural por una difusión instrumentalizada que se dirige a supuestos intereses homogéneos.

La comunicación a través de la radio responde alas características generales de cualquier comunicación social  y sin embargo nos encontramos con una radio que muestra con menos autenticidad las notas propias de la comunicación social; por ello los comunicadores que se dediquen a hacer radio deben tener ciertas características  imprescindibles como “la creatividad e imaginación” y con esto presento un segundo audio (entrevista a la Lic, comunicación  Flor Villalobos – quien lleva a cargo la radio de la escuela de comunicación USAT).

En el mismo rubro el autor antes mencionado la radio puede ser un instrumento que contribuya a mejorar los procesos de  formación de los individuos e incentiva la libertad de expresión, en la medida en que la radio puede ser un medio donde aquellos que habitualmente son receptores pasan a convertirse con extrema facilidad en emisores: formulan sus propios contenidos, elaboran sus particulares discursos y agilizan la retroalimentación del medio y sobre todo de la institución escolar.


Es verdad que en las instituciones estas las radios educativas ayudan en el proceso formativo del estudiante, pero a manera general por ejemplo en Chiclayo  cuando una radio sale bajo el concepto de radio educativa, no tiene la acogida que  merece, puesto que se ha acostumbrado al oído del oyente a estas radios comerciales que no construye identidades ni promueve la participación ciudadana , por ello se debe replantear propuestas de radios comunitarias que no estén bajo el titulo de radio educativas pero con creatividad  integre propuestas idénticas que den al radio oyente lo que necesita de la forma que le gusta.

Hans Burkhand en su estudio “La radio como una instalación sonora cotidiana”, nos refiere que la radio en sus primeros tiempos sabían que la imaginación estimulada por el oído trabajaba con imágenes y que se trababa de un espacio en el que no sólo se tiene que escuchar para poder aprender algo, sino en el que se es introducido  y donde de forma imaginaria uno también se puede mover cuando se ha producido la integración.

En este mismo rubro hacemos referencia a  Schafer cuando afirma que la radio se convertiría en radical si se transformase la misma naturaleza en emisor logrando una receptividad global en la que el lenguaje informativo no acaparase la última forma expresiva. Así, cuando hablamos de integración y escucha a los problemas sociales  tenemos en nuestro país radios comunitarias ejemplares tales como “La voz”  que en la actualidad  saben como integrar a sus participantes a sus procesos.

Por ultimo es realmente interesante el aporte de  Sandro Macassi Lavander en sus estudios “Recepción y consumo radial” cuando señala que la audición de la radio se inserta en espacios de interacción  de los que el oyente participa cotidianamente como la familia, el centro laboral, los amigos, etc. Además nos presenta dos grandes modalidades de cuyas combinaciones surgen todas las demás, la primera es llamada vertical que consiste en la escucha de una sola estación en toda su oferta radial, y la horizontal que se distingue porque en una misma hora los oyentes navegan por el dial de estación en estación deteniéndose cuando encuentra algo placentero.

En conclusión, la radio tiene un compromiso con la sociedad, ésta debe ser gestora de la contruccción de identidades, debe permitir que se pueda llevar a cabo una búsqueda de consensos o disensos o el fortalecimiento de identidades individuales, pues es  trascendental la creación de un espacio público en dónde los ciudadanos puedan opininar, contar sus problemas, es decir hablamos de una una verdadera propuesta de comunicación no de simple difusión de información, por ello urgente la radio necesita ser repensada.


 









[1] María Cristina Romo Gil. ITESO: Publicación Ciencias de la Comunicación No. 7 Ed. Diana 1987, http://www.suite101.net/content/el-uso-de-la-radio-con-fines-educativos-a12061