lunes, 14 de noviembre de 2011

La labor periodística: una batalla contra los intereses y verdades parciales


En la actualidad se ha puesto en tela de juicio la credibilidad de los medios noticiosos, un aspecto ineludible de la sociedad moderna; por ello la autentica función de un periodismo es aferrarse a la verdad de los hechos aunque existan presiones de cualquier índole que quieren someterlos al servicio de fines políticos, económicos al cual se debe resistir por un compromiso con la sociedad y su profesión misma; evitando caer así en verdades parciales que intoxican la libertad de información.

Como asevera Concha Mateos en sus investigaciones “Ninguna escuela de periodismo del mundo concede títulos académicos con licencia para robar, ni para estafar a la hacienda pública, ni para difamar basándose en la mentira”, no hay carnet de periodismo profesional que libre a los periodistas de cometer errores ilegales que les pueden conducir a la cárcel. Ser periodista no es ser inmune judicialmente. Asimismo proyecta un análisis sobre la libertad de expresión,  se defiende haciendo uso riguroso del periodismo. Intoxicando no se defiende. Y esgrimir como agresiones del estado los enjuiciamientos penales que sufren algunos periodistas por su vulneraciones del Código Penal, es, cuando menos, un desliz intoxicante.
John Gordon, redactor jefe del “Daily Express” declaró en cierta ocasión  ante una Comisión real británica: “El hecho brutal está ahí. Cada vez que vemos un artículo en la prensa concerniente a algo que conocemos, es más a menudo inexacto que verídico”. [1] Si uno de los promotores de la “gran prensa” era capaz de hacer tal confesión, no es extraño que encontremos afirmaciones aún más graves en personas ajenas a la prensa y, sobre todo, en quienes alguna vez se han sentido víctimas de su “falta de objetividad”.

Las múltiples investigaciones de científicos sociales y otros estudiosos de los medios de información, no obstante, nos han llevado a poder afirmar una serie de puntos en lo que respecta a esta profesión: primero, las noticias no constituyen un producto con definición objetiva, sino un fluido proceso humano que tiene como guía principal a las convenciones, útiles tanto para fines comerciales como para los de servicio público, segundo los medios noticiosos sirven a la logística y a las necesidades económicas de la organización noticiosa, y no tiene como impulso principal los ideales de servicio público. [2]
Se advierte del  peligro por las desviaciones que están tomando quienes encarnan y son los voceros de la tan buscada y ansiada libertad de expresión. El derecho a la información y la libertad de expresión se resienten. Las garantías de una sociedad democrática y abierta, y de una ciudadanía crítica, es decir, racional, resultan mermadas cada vez que se comprueba la deformación de la realidad, la desinformación consecuente, la manipulación de las empresas mediáticas solo movidas por los intereses particulares. Y todo ello como consecuencia de posiciones periodísticas redentoras que, mas que buscar la verdad, van con la suya a buscar los hechos que la atestigüen.[3]
El trabajo de Aurora Labio señala que es evidentemente, las deficiencias que se han ido arrastrando a lo largo de todo este siglo se han acumulado como parte del malestar de un colectivo profesional cada vez más asentado. Si antiguamente los periodistas eran trabajadores poco organizados y con escasa preparación en la mayoría de los casos, en la actualidad se han convertido en un grupo profesional cada vez más cualificado (sólo hay que pensar que el título de licenciado se está convirtiendo en requisito indispensable para acceder al trabajo) y que se está haciendo eco de una serie de problemas a los que está buscando solución. En primer lugar, nos encontramos con la inexistencia de un marco legal para la profesión. Sólo la prensa periódica no diaria posee un convenio marco estatal.

Para el resto, prensa diaria, agencias, radio y televisión no hay ningún marco legal que ampare a sus trabajadores. En la mayoría de los casos, estos se rigen por convenios de empresas, lo que los dota de cierta arbitrariedad y deja a establecer diferentes categorías en la profesión.[4]

El mundo de los medios de comunicación está dominado por cuestiones que pueden ir más allá de la labor periodística. Los medios, la prensa, ya no es el cuarto poder, sino que se ha convertido en parte del primer poder al relacionarse íntimamente con cuestiones económicas y políticas. La presión económica puede venir marcada desde el momento que el medio pertenece a una estructura empresarial con unos interese determinados y que se plantea como negocio que debe producir unos beneficios; de esta forma, la publicidad y la situación financiera de la empresa marcarán la pauta de los trabajadores, y el periodista no se podrá quedar al margen.

De esta manera, el periodista se ve abocado a convertirse en una pieza más del engranaje que hace funcionar al sistema, con lo que su función como contrapoder  pierde sentido. La trama económica y política domina la empresa periodística, actuando de forma separada y también de modo conjunto como único poder.Por ejemplo en Perú las denuncias por presiones políticas a los periodistas y atentados contra la libertad son frecuentes, el caso de los dos periodistas despedidos del diario El comercio por no apoyar a Fujimori es solo un muestra de cómo se intenta detener la verdadera labor del periodista[5]

Y es que en verdad, la falta de reflexión, la desvalorización de una investigación rigurosa, una agenda  reconstruida y la búsqueda de una sensibilidad primaria forman parte hoy de la cotidianeidad profesional”[6]. En la radio entender esto es primordial ya que es un medio de mayor alcance y tiene el potencial que muchos otros medios no poseen así se proyecta en la publicación de Paco Velazco [7] donde se narra una experiencia radial en la caída de Mahuad, cuando fueron los únicos que lograron trasmitir en vivo a pesar de los restricciones.

Entrevista 1: periodista Mauricio Urpe

 
Entrevista 2 : Comunicador Oscar Terrones 

Los periodistas frecuentemente se jactan de una gran integridad, y apelan al criterio de “objetividad” como valor supremo que regula su conducta, en sí la ética periodística se basa de hecho en este principio. Muchos se autoconvencen de que lo que ofrecen al público es simple y llanamente “la verdad” sobre los hechos, como metodología para lograr este fin, busca siempre presentar los dos “lados” de todo argumento. Según muchos periodistas, la objetividad de las noticias consiste simplemente en la veracidad y precisión en lo que se dice. Para ser objetivos, lo que hace falta es comunicar con veracidad los datos de hecho. Lo que se dice es (o fue) así.[8]

A manera de conclusión para intentar pasar de la crítica a las propuestas, a pie de lucha en defensa por la verdad donde medios de gran alcance  como la radio debe apostar por un trabajo en  periodismo ético, responsable consigo mismo y con los demás, propiciador de lectores críticos, conscientes de sus deberes y sus derechos y, por ello, un periodismo creador de ciudadanía.


[1] Vid. PINTO, Roger, La liberte d’opinion et d’information, Doma: Montchreatien, París 1995, 96.
[2] Lambeth, Un código de ética para la profesión, LIMUSA/Noriega Editores, 1ª Edición, México, 1992 San Trigo Ediciones, 1ª Edición, Madrid, 1996
[3] José Manuel Chillón Lorenzo(2009,). Crítica y objetividad. Estudios sobre el Mensaje Periodístico. pág. 157-173
[4] Aurora Labio. La profesión periodística ante los intereses de la estructura informativa http://grupo.us.es/grehcco/ambitos06/labio.pdf
[5] Ver caso en:  http://www.elmundo.es/america/2011/04/22/noticias/1303426156.html
[6] MARTÍNEZ ROMERO, José Ramón: “Los Mass Media: ¿Un poder sin contrapoder?, en AA.VV.: Periodistas,hoy, Federación ndaluza de Asociaciones de Prensa, Sevilla, 2000, p. 40.
[7] Paco Luna. http://chasqui.comunica.org/velasco69.htm
[8] “LIBERTAD Y TIRANÍA MEDIÁTICAS”. El P. Williams es Decano de la Facultad de Teología y Profesor de Teología Moral y Doctrina Social de la Iglesia en el Ateneo Pontificio Regina Apostolorum de Roma.

La audiencia como finalidad de los géneros radiofónicos


La radio es para y por las audiencias sea cualquier el género radiofónico mientras éste muestre creatividad  y donde el periodista gestione la información tomando como propia la gestión de la audiencia, permitiendo así la participación de ésta, mejorando la relación del público con el medio.
Según Luis Pastor la gestión de las audiencias permite que las aportaciones tengan una orientación en la mejora de la producción periodística y es que en verdad establecer una relación con el público es una de las asignaturas pendientes de los medios de la comunicación, así lo que importa desde un punto de vista no es participar sino como se gestionan periodísticamente las aportaciones de las audiencias[1]
Apesar que expertos como Romero Figueroa [3] señalen que a partir de las aportaciones de los géneros periodísticos resulta más sencillo ubicar las producciones radiofónicas ya que la información se realiza mediante descripciones, el texto que conforma estas descripciones tiene diversas formas de construirse de acuerdo a la naturaleza de su propósito. Se debe manejar bases teóricas sobre géneros radiofónicos como Pilar Martínez y Susana Herrera refieren en sus estudios [2]  pues  éstos se ha limitado con frecuencia a realizar una adaptación de los géneros informativos para la prensa sin considerar que la voz que enuncia el discurso, las propiedades de la comunicación oral, la fugacidad del mensaje son rasgos que no encuentran una respuesta estructural en dicha teoría.

La definición de género ha tenido gran dificultad para identificar y acordar las regularidades propias de cada uno de los géneros y dar con categorías descriptivas válidas en los diferentes modelos de radiodifusión sin embargo entre los criterios mas resaltantes y que en la actual se busca  es el  criterio de la búsqueda de la originalidad en la producción individual.
“Los géneros existen y cumplen una función imprescindible en el quehacer periodístico” y tienen tal importancia que “su desaparición significaría la desaparición misma de la profesión periodística y el ocaso del periodismo como actividad humana” (Martínez Albertos, 1998: 77). Aunque tradicionalmente los géneros en los medios impresos han recibido una atención preferente, es importante recordar que su relevancia se hace extensiva a todos los medios, incluido, cómo no, el radiofónico. Por ello se debe formular una nueva teoría de los géneros radiofónicos que sea capaz de superar las contradicciones que se observan en la actualidad, como son la existencia de denominaciones erróneas y la pérdida de un marco normativo.[4]
Como afirma AURA, Alejandro, la radio actual ha olvidado no sólo los contenidos, sino especialmente las fórmulas más creativas de presentación, en favor de una información de actualidad presentada de la forma más sencilla y, si puede ser, siempre en directo, es decir, de la manera más económica y fácil posible. Por eso, hace tiempo que los investigadores del medio venimos denunciando la crisis creativa por la que atraviesa, una crisis que se manifiesta en la inmovilidad de contenido y forma sonora.[5]

Entrevista 1 al comunicador  Eduardo Velásquez



Entrevista 2 al comunicador Ojeda






Se trata de pensar toda la comunicación desde la otra orilla, desde la cultura y el lenguaje y las preferencias y la clase social de los radioescuchas a los que me dirijo. Va en mayúsculas la enseñanza de Kaplún: LA VERDADERA COMUNICACION NO COMIENZA HABLANDO, SINO ESCUCHANDO.Esto, que parecería de sentido común —de sentido comunicativo—, no lo es tanto. Cuando vamos a idear un argumento o a redactar un comentario, nuestra primera preocupación suele ser ¿qué voy a decir yo?, en lugar de la otra pregunta, la fundamental, la que facilitaría mucho las cosas: ¿qué quiere escuchar el otro, la otra, es decir la audiencia?[6]
La producción radiofónica se centra primero en aquellos mensajes de elaboración más sencilla, los géneros radiofónicos, que además se integran en otros más amplios, los programas radiofónicos, abordados en un nivel posterior, esto implica un conocimiento teórico como paso previo a la realización de las prácticas no sólo como orientación y establecimiento de pautas de trabajo, sino especialmente como sistematización de saberes, razonamiento de procesos y fomento de la reflexión inherente a todo proceso creativo. [7]

Asi se tiene propuestas como las de Mrayo y Perez que aborda de forma muy simplificada los géneros de una participación de la audiencia ya que en  todos los casos habla de una participación de los oyentes como de un único género radiofónico que los relaciona a discursos fundamentales como la narración, descripción, exposición y argumentación.
A todo esto se suma la participación de las audiencias en la producción de la radio y como señala Shayne Bowman y Chris Willis, en sus estudios “Cómo las audiencias están modelando el futuro  de la noticias y la información” [8],la diferencia más obvia entre el periodismo participativo y el periodismo tradicional está en sus estructuras y en su organización, puesto que los medios tradicionales son creados por entidades jerárquicas, construidas para el comercio. Su modelo de negocios y organización se con-centra en la emisión y en la publicidad enfocada. Valoran el riguroso flujo de trabajo editorial, la rentabilidad y la integridad y el periodismo participativo es creado por comunidades en red que valoran la conversación, la colaboración y el igualitarismo por encima de la rentabilidad.
Las personas que siguen un medio de comunicación mas que un mercado de información; así la gestión del público facilita por un lado que el publico participe y permite por otro lado que las aportaciones tengan una orientación en la mejora del producto periodístico  y de la relación con el medio, donde hay seis faces que intervienen: La primera consiste en la segmentación, la segunda en la adecuación de la información, la tercera platea vías de participación del público, la cuarta se fundamenta en el seguimiento y tutorización  de los debates, la quinta supone la publicación de la información que sean útiles al resto de público.
Así el periodismo participativo comparte el interés por la conversación entre agentes que supera la figura tradicional del periodista enfatizando la fase del proceso que afecta a la publicación  por encima de la fase del proceso periodístico de selección, donde el dialogo busque un objetivo común entre las partes y no la victoria de una de ella, ya que el dialogo en un marco de este tipo multiplica el capital cívico de una comunidad y  de cualquier manera, un proceso productivo siempre mantiene como objetivo el nacimiento de una nueva realidad; ésta se convierte entonces en su primera condición.[9]

Se concluye que cualquiera que sea el género radiofónico se debe trabajar a la par de la gestión de las audiencias donde el periodista se deba a su público tomando la propia gestión de su audiencia para asi tener una mejora del producto periodistico, y que este sea creativo, gestor de participación por las audiencias y dado a su público.



[1] Luis Pastor. La rueda de la gestión de las audiencias. http://www.ucm.es/BUCM/revistas/inf/11341629/articulos/ESMP0707110169A.PDF
[2] M del Pilar MARTINEZ-COSTA. Los géneros radiofónicos en la teoría de la redacción periodística en España.
[3]  Romeo Figueroa en su libro (1997) ¿Qué onda con la radio? Editorial Alambra Mexicana.
[4] Martínez Albertos, J.L. (1998). Los géneros periodísticos en los medios de comunicación impresos, ¿ocaso o vigencia?. Comunicación y estudios universitarios, 8, 67-78.

[5] AURA, Alejandro (1997). «Palabras vivas, palabras muertas: la radio creativa». I Congreso Internacional de la Lengua Española. Zacatecas, abril
[6] Mario Kaplún, El comunicador popular. CIESPAL, Quito,1985, pág 119
[7] Emma Rodero Antón – Producción. Concepción de la Producción Radiofónica. Radiofónica.http://www.perio.unlp.edu.ar/produccionradiofonica1/Bibliografia/rodero_anton.pdf
[8] Nosotros, el medio(2003) Cómo las audiencias están modelando el futuro  de la noticias y la información, Por Shayne Bowman y Chris Willis Editado por J.D. Lasica. Ver http://www.hypergene.net/wemedia/download/we_media_espanol.pdf
[9] Emma Rodero Antón – Producción. Concepción de la Producción Radiofónica. Radiofónica.http://www.perio.unlp.edu.ar/produccionradiofonica1/Bibliografia/rodero_anton.pdf

viernes, 16 de septiembre de 2011

Géneros,programas y formatos radiofónicos : algunas reflexiones para su difusión (Carlos Araya Rivera)


Actualmente en radio existen variadas programaciones de acuerdo al público al que se dirigen o el objetivo que persigue, donde  género y formato han tendido a confundirse provocando denodados esfuerzos por darles definición, para así comprender en teoría y práctica la producción radiofónica.

Las discusiones sobre el real significado de géneros, formatos y programas, ha dado pie a una serie de estudios que afirman que la programación radiofónica se planifica y organiza de mayor a menor  desde géneros como formas especificas para organizárselos contenidos, programas como estructuras intermedias por uno o más géneros y formatos como las formas generales para organizar el conjunto de programas y géneros de una emisora.

En cuanto a los géneros ha sido difícil encontrar una clasificación satisfactoria; se han dado desde la clasificación de Kaplun con 12 formatos hasta la clasificación de Carlos Araya donde los agrupa en dos grupos; géneros menores como los informativos, interpretativos, de opinión y de discusión así como los educativos, persuasivos y de entretenimiento,  y géneros mayores como la radionovela p documental, dándose aquí el principio de hibridación en evidencia.
Aqui las palabras del periodista de RPP, para mejor comprension del tema:

Así después de un gran panorama conceptual se afirmó que no existe una única clasificación de los géneros y los géneros no existen en un estado puro puesto que existen híbridos y aunque busquemos nuevas tipología de los géneros ya sea por la producción de los mensajes, la intencionalidad del emisor y la segmentación de los destinatarios todos buscan la comprensión de los contenidos en la programación radiofónica y llegar a su audiencia.
Ahora si bien los géneros deben tomar las características de la audiencia con mayor razón los formatos, puesto que dependerá de la forma en que una emisora sea programada para que los oyentes sintonicen o no una estación; sin embargo hay que tener en cuenta que no se pueden definir a un público por aspectos ya sean demográficos, de género o edad sino se debe considerar el entorno, usos del medio entre otros criterios, es así que se ha llegado a definir dos clases de publico; el publico meta como el grupo objetivo y el público bienvenido como la población que podría estar interesada en los contenidos que se trasmite. Para finalizar hay distintos formatos de programación desde los llamados generalistas hasta los de especializada o temática; aunque nuestras emisoras no siguen al pie de letra las clasificaciones sobre formatos de programación sino que tropicalizan las versiones originales creando propuestas nuevas.
En conclusión la radio responde a las necesidades de la audiencia donde la creatividad es esencial y las distintas formas de organización de los mensajes radiofónicos puedan facilitar la expresión creativa de los contenidos así como su correcta comprensión, siendo indispensable “planificar” para optimalizar los recursos buscando una forma de organización apropiada del contendido.

El feminicidio en la nota roja (Yesika Cruz Martinez)


En la actualidad la discriminación hacia la mujer sigue de manera marcada en las en los medios a través de notas rojas "sensacionalistas", fortaleciendo valores equívocos, donde el feminicidio es un acto más allá de los asesinatos misóginos que se aplica a todas las formas de asesinato sexista.

Los asesinatos a la mujer visto desde el lado rojo o esa muerta lenta a través de la discriminación no pueden ser  resguardados por los medios de comunicación pues un comunicador tiene la misión de ser actor en la construcción de una sociedad democrática, equitativa y donde sus publicaciones le den lugar de igual a las mujeres de todo el mundo, dejándola de utilizar como medio de venta o de prensa amarillista.

Escuchemos la declaración de la periodista Zoila Cabrejos quien refiere a tema como falta se sensibilidad en los medios al publicar notas sobre mujeres:

Asimismo el feminicidio encuentra sus bases teóricas en la perspectiva de género, puesto que en una sociedad patriarcal la feminidad ha sufrido consecuencias de una sociedad inequitativa. Se ha utilizado una estrategia de naturalización a la manera de cómo debe o comportarse una mujer, puesto que las diferencias sociales entre hombre y mujer entre diversas culturas como parte de una misma cultura, así hemos escuchados frases como “los hombres  no lloran como mujercitas”.

Así la construcción de géneros y naturalización trasciende el pensamiento, transformándose en una actitud sexista, la que minimiza la acción de las mujeres, contrario a los que sucede con el sexo opuesto cuyas acciones se ven como positivas, derivando un pensamiento androcéntrico.

Escuchemos al respecto  lo que nos refiere el periodista de RPP:


En base a los análisis discursivos tanto en estructura como en fondo (situación de las mujeres en Oaxaca) por Yesika Cruz Martinez, encontramos que los temas de violencia contra las mujeres son tratadas como nota roja, solo como actos delincuenciales, que en las notas de prensa se expresan los cuerpos de la mujer de forma denigrante, tanto en fotografía como en texto, dándose a conocer de manera hasta morbosa los hechos donde carece de un análisis por comprender que hay detrás del hecho y la condición de esas mujeres.

Pero ¿Qué efectos produce esta situación?, la realidad analizada es una realidad que en nuestro país y alrededor del mundo se vive provocando la exclusión, el silencio sobre la existencia de la mujer, esa consideración como subalternas dependientes de los varones; y podemos argumentar a ello frases genéricas utilizadas a veces inconscientemente como cuando se dice “la evolución del hombre a través de los años por no decir de la humanidad”, o los ciudadanos por decir la ciudadanía.

 A todo ello en los medios de comunicación y demás áreas se debe usar “la transversalidad” como herramienta indispensable para incorporar la perspectiva del género en la vida diaria, dejando se utilizar un lenguaje sexista que minimiza a la mujer siendo además discriminatorio.

A manera de conclusión, se advierte que se debe superar las formas excluyentes hacia la mujer del lenguaje, dándose en todos los procesos de toma de decisiones la perspectiva de relaciones de los géneros aprovechando espacios para la equidad. El periodismo debe promover equidad entre ambos sexos y reflexiones sobre lo que se escribe o trasmite  buscando equilibrio en la información y la lucha por una sociedad justa y donde las mujeres tengan el lugar que les corresponde, digno e igualitario.

jueves, 15 de septiembre de 2011

El trabajo del periodista de radio (Jhon Murelaga)


El avance tecnológico actual ha permitido introducir nuevos contenidos y un mayor servicio al oyente; esto exige una mayor capacitación del periodista en radio, sea por la utilización de los medios tecnologicos o por la agilidad con que debe cubir una noticia; muchas radios platean la disyuntiva de mantener el tradicional proceso de la elaboración analógica y difusión de la programación o evolucionar a las vías digitales; asi la radio ha dado un salto a la modernidad en un proceso de digitación; por la digitalización en la emisión y recepción y por la transmisión binaria en el proceso de producción radiofónica.
Hoy en dia es inimaginable una redacción sin ordenadores, ya que significa un avance para la elaboración misma de la noticia, mayor accesibilidad de datos pero el cambio no fue sencillo, ni lo sigue siendo hoy en día como afirma y comenta el periodista Chuquizuta Santamaría,  de la rotativa regional de RPP:

Así podemos referir que las ventajas de la informatización es la mayor agilidad a la hora de informar, de realizar cualquier tipo de cambio, accesibilidad al internet, etc. Y es que en realidad no se puede pasar por alto el instrumento de internet en la radio, aquel invento de capacidad aglutinadora y es que se ha convertido el mayor competidor de las agencias de noticias; y es que en realidad ofrece para los profesionales de radio y otros medios un sinfín de posibilidades ya que con un clic accedes a las páginas que desees; sin embargo existe la desventaja de la inmediatez que genera noticias a medias.
Otro medio como refiere Jon Murelaga que se ha convertido en un elemento esencial de periodista es el teléfono móvil  cuya virtud es su movilidad y la inmediatez que se gana con su uso, es decir permite una comunicación inmediata entre emisora y el profesional; a esto se le puede agregar el uso de la unidad móvil para cubrir informaciones, siendo los dos intermediarios precisos que aportan inmediatez, rapidez, intercomunicación y amplitud de cobertura.
En cuanto al sistema de grabación  utilizado en rueda de prensa o citas permite al periodista registrar la noticia, ahora vive acompañado de una grabadora de mano, pequeña de fácil transporte o las grabadoras conectadas a un micrófono que por lo general ofrecen una grabación más precisa y limpia, el autor a ello agrega lo propicio que puede ser la utilización el mini-disc, cuyo manejo no es difícil.Se dice que la radio pierde contenido informativo tan rápido como lo difunde, nadie graba programas y los colecciona; sin embargo cuando se piensa en quedarse con el material realmente sugerente para una futura utilización ya sean cortes de voz muy concretos, documentales históricos o almacenamiento de programas concretos se utilizan por lo general CD-ROM y DVD ROM, facilitando su almacenamiento.
No  debemos dejar de lado el tema del disco duro, que permite al profesional acceder en todo el momento al material de audio necesario siempre y cuando todavía permanezca grabado y con su límite de capacidad.  Llegamos al punto de las rutinas de trabajo, donde es necesario indicar que las nuevas tecnologías modifica los aspectos laborales entre los que está: el reciclaje y reconversiones profesionales y la demanda de un tipo de profesional capaz de desempeñar funciones diferentes.
A manera de conclusión afirmo que la tecnología ha cambiado la rutina del periodista radial, la agilidad con la que maneja las informaciones, el poder de registra la noticia de manera clara a través de soportes, el nivel de almacenamiento en ordenadores, o en discos; todo ello impulsa al periodista de hoy  desenvolverse de manera eficiente entre aparatos de todas las clases y formatos, pues que la transición digital les exige un desenvolvimiento cada vez más apegado a los adelantos que agilizan la información y lo hace un aprendiz estrella para poder llevar la profesión.

El periodista tiene que verificar y verificar (Maria Teresa Ronderos)


Un periodista que no verifica su informacion o la investiga antes de publicarla puede ocasionar grandes fatalidades puesto que los medios de comunicacion mueven el mundo; “Denunciar aquello que está mal es hacerse de la voz de los que no tienen voz para poderle hablar duro al poder”, esa es la tarea en prensa por ello algunos gobiernos ven como amenaza  a los periodistas, pues son los periodistas los que controlan, vigilan el poder y denuncian aquello que está mal.
Pero ¿Qué se debe hacer cuando se vive en medio de sociedades polarizadas o se censura toda aquella información que esté contra el gobierno o la editorial de medio? realmente se debe armar de tres puntos fundamentales: proteger la libertad de la información, lo segundo es el llamado “ego”, es decir bajar del ego para hacer un trabajar colectivo, no se trata de figurar sino de informar a la sociedad y se debe jugar limpio es decir jamás mentirle  una fuente  puesto que el lema del periodista debe ser la “verdad como pasión”.
Aquí las palabras del periodista Edgar Martin, de radio Exitosa:
El periodismo es una profesión fuerte se corre riesgos en la labor de cubrir informaciones como explica María Teresa Ronderos que en Sociedades de conflicto, lo periodistas sufren mucho de estrés postraumático ocasionando efectos psicológico fuertes para ello se debe recurrir a ayuda profesional.
Es esencial la ética en el periodismo y ésta no dependerá de que tan buena persona sea un periodista sino de qué tan bien use las técnicas del periodismo, pues de no sabe usar las herramientas del oficio puede equivocarse y causar la muerte a una o muchas personas. La primera herramienta es la verificación, esto implica tener las dos versiones de lo acontecido. Por ejemplo un periodista hace años atrás publico una nota acerca de una denuncia pública de una mujer hacia su conviviente por intento d violación a su hija, publicaron las fotos del supuesto criminal pero luego días después publicaron la versión del acusado y resulto ser un engaño que l mujer había tramado por celos y despecho.
Esto es solo un ejemplo a lo que la autora señala como una herramienta básica “la verificación”, siguiendo con esta línea tenemos la segunda herramienta que es contar con fuentes que corroboren el suceso, y la tercera es mencionar de donde salió la información.Otro punto es contextualizar la información, por ejemplo si tenemos un crimen tenemos que informar cual fue el contexto, las circunstancias en que sucedió y sea históricas, políticas, geográficas; pues se puede entender todo mal y en lugar de informar se desinforma.
A todo esto hay que tomar en cuenta los  tipos de censura que existen en el nuevo orden mundial, siendo la primera  y la más brutal el terrorismo, la que calla con una amenaza  una bala; la segunda es la económica, este caso es muy usual ya que los periodistas son censurados, despedidos de su trabajo o se le quita publicidad al programa por decir algo que no conviene a los dueños del medio. La tercera censura es la ignorancia, sucede cuando el periodista calla algo porque no lo conoce, dejando así de informar.
En conclusión un periodista tiene el deber de ser la voz de aquellos que no la  tienen para  reclamar sus derechos, para frenar los abusos de poder; cuando informe las noticias debe VERIFICAR LA INFORMACIÓN QUE DARAN A CONOCER, INVESTIGAR, valiéndose de herramientas . Las censuras para silenciar la verdad intentara siempre frenar el deber de un verdadero periodista pero con ética, investigación y buena formación podrá llevar  cabo su verdadera misión llevar la información lo mas apegada a la verdad, sin desinformar porque esta es la mentira manipulada sino como verdadero servicio a la sociedad; pues la labor periodística va más allá de informar por informar, involucra comprometerse de manera seria con el público.